Fábula sobre la Fundación de Guanaguana

Corría el mes de Mayo de 1729, cuando un tropel ensordecedor de bejucos y ramas quebradas, hizo correr a un grupo de indígenas que reunidos veían como el cielo se ponía gris, tal vez presagiando la lluvia que caía muy seguido por esa zona, algunos pudieron huir, pero otros cayeron ante las balas del arcabuz invasor.

Los hombres que acababan de llegar, eran los mismos que desde Cariaco siguieron la ruta del cerro negro, fundando pueblos y villas: Santa Maria, La Guanota, San Agustín, Caripe…

Y hasta aquí llegaron en sus briosos caballos, y sus perros despiadados. Que ladraban hasta jadear cuando olfateaban a un indio.

Los hombres que llegaron a caballo interrumpieron la tensa calma de siempre. Eran blancos, altos y fuertes. Sus risas jactanciosas retumbaban en el eco de la montaña. Eran los mismos de los que llegaron al territorio allá por 1498 cuando Colón llegó a las costas de Macuro.

Pero los hombres de estas tierras se fortalecieron y se unieron bajo el axioma caribe: “Ana Karina Rote y Toro Papiro Nanto”, (Solo los caribes somos hombres, los demás son esclavos)y bajo esta premisa, Las aguas de Guatatá se tiñeron de rojo. El poderío español fue superior no podía la flecha envenenada de curare contra la pólvora del arcabuz.

Ahora llegaban los frailes que empezaron a evangelizar y a enseñar el castellano, y se construyó el primer templo cerca del Guatatá. Allí comenzó el verdadero poblamiento, en esta tierra donde el indígena practicaba la agricultura, la siembra del Maíz se hizo más productiva y su verdor se confundía con una manada de pericos volando por las montañas.

Y tuvo que suceder una fuerte crecida del río después de muchos días de lluvia arrasó todo a su paso: siembra, animales, viviendas y también la iglesia. Por lo que los frailes decidieron construirla nuevamente en una parte alta alejada del río.

La población iba en aumento, ya blancos e indios compartían las labores agrícolas, trajeron de España vacas y caballos que pastaban cerca del Guatatá. El café seguía produciéndose… Y así se hizo San Miguel Arcángel de Guanaguana que de verdad, verdad, era como le llamaban los indígenas: ABUNDANTE AGUA.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, estoy recogiendo información para una página de Manchones (Zaragoza). He dado con su página porque habla de fray Ignacio de Manchones. Me gustaría ampliar algo más la información sobre este fraile. Manchones es un pueblo pequeño, y nos resulta curioso que en el año 1770 hubiera un vecino que se fuera a tierras tan lejanas.
Un saludo. Gracias.
yovien@gmx.es

Gustavo Alfredo Dominguez Martinez dijo...

Estimado Lugo, anexo complemento de su publicación en este blog, elaborado por la Prof. Liliarby Velásquez... Saludos:

En el último año del gobierno del Doctor Raúl Leoni (1969), construyen la sede de la Escuela, con dirección, secretaria, biblioteca, laboratorio, taller de manualidades, un salón de computación y obreros.

En el año de 1980 se creó la “Unidad Educativa Barrancas”, bajo la dirección de Rosa Elvira de Farías, produciéndose el cambio de “Escuela Primaria” a “Escuela Básica”, con motivo de la construcción de la nueva para el Ciclo Básico, ubicada unos 200 metros más adelante de la actual escuela, salida hacia el caserío La Cuchilla. Para el período escolar 1997-1998, la institución inició el Ciclo Diversificado, mención Ciencias con la primera promoción en 1999, integrada por 34 bachilleres, cursando estudios en la sede de la “Escuela Barrancas”, manteniéndose la denominación de la sede educativa y el mismo código institucional. En este mismo año, se inicia la mención de Humanidades, siendo sus primeros docentes José Rafael Márquez, Ismarilis Ramos, César Villarroel, Elsy Farías de Morales, Beatriz Tabata, Rosa Yuraima Cesín, Milagros Farías y el padre Cesáreo.

Para el período 2002-2003, ingresan al gremio de profesores Joaquín Marín, Oscar Velásquez, Lilia Mendoza y Glenis Dominguez, dándose inicio a los estudios de Técnico medio en Comercio y Servicios Administrativos, mención Informática.

En el año 2004 ingresó el profesor César Vásquez en esta área y se concretó la primera promoción de Técnico Medio en Comercio y Servicios Administrativos, mención Informática.

Es para el año de 2006, cuando se convierte de “Tercera Etapa Media y Diversificada” a “Unidad Bolivariana”. Para finales de este mismo año, asume la Dirección el Prof. Armando Guevara, en reemplazo de la Prof. Rosa Elvira Jiménez de Farías, quién se desempeñó en el cargo desde el año 1980.

El 16 de Junio del 2010, el Profesor José Gregorio Loroño solicita ante la Zona Educativa del estado Monagas, la separación y cambio de código de la “Unidad Educativa Barrancas” bajo la nueva denominación de “Liceo Nacional José Francisco Bermúdez”, siendo aprobada por Resolución Nº 063 de fecha 21 de octubre de 2010, publicada en Gaceta Oficial Nº 39.536 de fecha 22 de octubre de 2010 con el fin de lograr un mejor desempeño a nivel directivo.

El número de docentes adscritos ha ido en aumento por el incremento de la población estudiantil y por la creación de nuevas secciones que exige la dinámica Socio-Educativa de los nuevos tiempos.

La presente reseña histórica refleja la evolución de la localización y las personas que contribuyeron y estuvieron presentes para que se forjaran bases en el logro de lo que fue “Unidad Educativa Barrancas”, y que día a día el futuro de nuestro pueblo está en manos de ella. Si bien esta referencia se queda muy corta, en vista, que aún faltan antecedentes pero sería de mucha ayuda quien podría a ampliar el texto, que serviría de referencia para ir completando la historia local de la educación en Guanaguana.

Gustavo Dominguez Martínez
Fuentes:
1. http://valledeguanaguana.blogspot.com/2008/06/fabula-sobre-la-fundacin-de-guanaguana.html

2. Unidad Educativa Barrancas. Proyecto: REFORESTAR LAS ZONAS ACUIFERAS DE LA POBLACIÓN DE GUANAGUANA, MUNICIPIO PIAR DEL ESTADO MONAGAS. Prof. Liliarby Velásquez

Gustavo Alfredo Dominguez Martinez dijo...

Leyenda del tesoro de Boves

Cuenta una leyenda que el caudillo español José Tomás Boves (Oviedo, 1782 - Urica, 1814), después de librar varias batallas victoriosas en el oriente del país, llevó consigo un tesoro que robó en Cumaná cuando tomó la ciudad. En vista de que debía continuar la campaña realista y combatir en Urica, enterró el tesoro con la ayuda de su esclavo y seis soldados en un valle llamado Los Pacas, al sureste de San Antonio de Capayacuar. Cuando el tesoro ya estaba semienterrado, Boves y su esclavo dieron muerte a los soldados y luego Boves mató a su esclavo con el fin de no dejar testigos. Según cuentan, Boves dijo: “Sus espíritus guardarán de que el oro y las alhajas no sean desenterradas por ningún otro”. No obstante, mientras Boves luchaba en la batalla de Urica murió de un lanzazo. Jamás se localizó el tesoro y se dice que un jinete sobre un caballo negro lo resguarda. Sólo perdura la leyenda y un misterioso cofre de hierro labrado donde se dice que Boves llevaba las alhajas y el oro, el cual se encuentra en el Museo Colonial de San Antonio de Capayacuar.

Esto es un pequeño aporte a las historias fabuladas y leyendas de nuestra región. Con ella se pretende ir enriqueciendo nuestro acervo histórico.cultural.